19 enero 2009

UN POCO DE ROMÁNICO


A mamá y a papá les gusta visitar monumentos cuando viajamos. A mi no es que me moleste, porque además suelo atender mucho a las explicaciones que me dan (no siempre las entiendo, pero al menos me esfuerzo), pero llega un momento que me canso. Y entonces, nada mejor que una buena carrera para despejarme. Y si es por el claustro románico de la colegiata de Santillana del Mar, todavía mejor. Así ellos se entretienen con sus esculturas y sus cosas y yo paso un rato divertido.

1 comentario:

Paula García dijo...

Hola Flavia, que tal nos por aqui mal fai tanato vento.
Pasao ben